Una madre siria se prende fuego junto a sus tres hijos ante la falta de alimentos

Siria campo de refugiados
Jordi Bernabeu Farrús

el DiarioSolidario

Sundus Fathallah, de 28 años, refugiada siria se encuentra en estado crítico tras prenderse fuego junto a sus tres hijos en el campamento de refugiados de Rukban, cerca de la frontera de Siria con Jordania. La madre protestaba por la falta de alimentos, mientras observaba impotente que sus hijos se morían de hambre.

La mujer y su bebé resultaron gravemente heridos, mientras que los otros dos niños sufrieron heridas leves. Fueron refugiados del propio campo quienes apagaron el fuego, y les evacuaron a un hospital en Jordania, han confirmado un portavoz de la organización Khaled al-Ali.

«La mujer refugiada sufre quemaduras graves», ha confirmado el médico Shukri Shihab.

Un portavoz de la agencia de defensa civil en el campo, Khaled al-Ali, ha afirmado que había informes contradictorios sobre el incidente. «Algunos sugieren que fue herida en un incendio en su tienda, mientras que otros dicen que ella se suicidó», dijo.

Pobreza y hambre

«Su hermano en la ciudad de Idlib, en el norte de Siria, confirmó que ni su hermana ni sus sobrinos habían comido nada durante las últimas dos semanas«. El esposo de la mujer aseguro por vídeo que su esposa se había suicidado debido a la pobreza y el hambre.

«Nuestra información muestra que la familia de la mujer es muy pobre y no tuvieron nada que comer en las últimas dos semanas», dijo al-Homsi.

El régimen sirio ha impuesto un fuerte sitio alrededor del campamento, provocando el deterioro de las condiciones humanitarias para sus residentes. Cerca de 60.000 refugiados viven en condiciones difíciles en Rukban, ubicado en una zona remota del desierto sirio cerca de la frontera con Jordania.

La mayoría de los desplazados huyeron de las zonas del este de Siria una vez habían caído en manos del grupo terrorista Daesh, y quedaron atrapados después de que las autoridades jordanas cerraran la frontera.

Inanición y falta de medicamentos

El año pasado, al menos 20 personas murieron debido a la falta de servicios médicos dentro del campamento. En una declaración emitida a fines del año pasado, la Red Siria para los Derechos Humanos (SNHR, por sus siglas en inglés) afirmó que las muertes de seis refugiados fueron el resultado de la inanición, la enfermedad y la falta de medicamentos.

En toda Siria, más de 13 millones de personas siguen dependiendo de la ayuda humanitaria, siete años después del inicio de la guerra civil, de los cuales unos 6 millones son desplazados internos que sufren inseguridad alimentaria.

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