el DiarioSolidario
La incertidumbre en torno a la pandemia del coronavirus en Italia y en España, ha provocado el aplazamiento de la tercera misión de 2020 del Aita Mari, que de momento no partirá a alta mar desde el puerto de Siracusa donde se encuentra atracado. Salvamento Marítimo Humanitario no contaba con la certeza sobre la posible concesión de permiso pertinente para zarpar y de puerto seguro para atracar en caso de cumplir con la misión o deber retornar. Asimismo, esta semana entra un frente en la zona con olas de hasta tres metros que dificultaría mucho la navegación.
“Es una situación dolorosa porque, en los últimos días, nos han alertado de varios naufragios y de una devolución en caliente. Alarm Phone (la red de voluntarios que monitoriza el Mediterráneo) informaba el sábado de que una patera con 49 personas había sido devuelta a Libia. En el mismo día, Malta auxiliaba a otra embarcación que llevaba más de 48h en el agua con 110 personas.
Por otra parte, la ONG continúa su trabajo en Quíos (Grecia) a disposición de las autoridades en caso de que quieran proceder a realizar nuevos protocolos contra la epidemia del coronavirus entre la población migrante.
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En la isla, el domingo había llegado un nuevo bote y la atención la realizó el personal voluntario de la organización. “Queremos agradecer a los sanitarios que están dando lo mejor de ellos/as mismos/as en España. Y que, además, siguen garantizando los relevos de voluntariado en Quíos. Vistas las circunstancias, es una buena noticia tener los equipos cubiertos hasta mediados de abril”, aseguran..
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