el DiarioSolidario
139,2 millones de personas afectadas y 17.242 han fallecido en desastres relacionados con el clima desde el inicio de la pandemia. Esta es la conclusión de un nuevo análisis publicado por la Federación Internacional de Sociedades de la Cruz Roja y de la Media Luna Roja (FICR) y el Centro del Clima de la organización, sobre los efectos combinados de los fenómenos meteorológicos extremos derivados de la crisis climática y el Covid-19.
Asimismo, se estima que 658,1 millones de personas vulnerables han estado expuestas a temperaturas extremas. A través de nuevos datos y estudios de casos concretos, el informe “The compound impact of extreme weather events and Covid-19“ muestra cómo la población mundial se enfrenta a múltiples crisis y hace frente a fragilidades superpuestas.
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La inseguridad alimentaria causada por las condiciones meteorológicas extremas se ha visto agravada por la Covid-19. Los sistemas de salud están al límite y los más vulnerables son los más expuestos a los choques superpuestos.
Sequía, violencia y pandemia
Un ejemplo es el caso de Afganistán, donde los impactos de la sequía extrema se ven agravados por el conflicto y la pandemia. La sequía ha paralizado la producción agrícola de alimentos y ha mermado el ganado, dejando a millones de personas hambrientas y desnutridas.
En Honduras, la respuesta a los huracanes Eta e Iota durante la pandemia, también supuso retos adicionales. Miles de personas se quedaron sin hogar en refugios temporales. Las medidas contra el Covid-19 en esos refugios requirieron el distanciamiento físico y otras medidas de protección, lo que limitó la capacidad.
En Kenia, la pandemia choca directamente con las inundaciones en un año y las sequías en el siguiente, así como con una plaga de langostas. Más de 2,1 millones de personas se enfrentan a una grave inseguridad alimentaria en las zonas rurales y urbanas. En el país y en toda África Oriental, las restricciones ralentizaron la respuesta a las inundaciones y el alcance de las poblaciones afectadas, aumentando su vulnerabilidad.
Medidas inmediatas
El documento también subraya la necesidad de abordar ambas crisis, la climática y el Covid-19, simultáneamente, ya que la pandemia ha afectado a los medios de subsistencia en todo el mundo y ha hecho que las comunidades sean más vulnerables a los riesgos climáticos.
«El mundo se enfrenta a una crisis humanitaria sin precedentes en la que el cambio climático y la Covid-19 están llevando a las comunidades a sus límites. En vísperas de la COP26, instamos a los líderes mundiales a tomar medidas inmediatas no sólo para reducir las emisiones de gases de efecto invernadero, sino también para hacer frente a los impactos humanitarios existentes e inminentes del cambio climático». Presidente de la FICR, Francesco Rocca.
La pandemia de Covid-19 ha tenido un impacto duradero en los riesgos climáticos. Los gobiernos deben comprometerse a invertir en la adaptación de las comunidades, en los sistemas de anticipación y en los agentes locales, finalizan desde la ONG.
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