el DiarioSolidario
El sector de las finanzas éticas y sostenibles en Europa tiene un valor de 715.000 millones de euros y representan el 5% del PIB de la UE. En su interior coexisten diferentes realidades : los bancos éticos que están en condiciones de responder a la crisis mejor que las entidades de crédito tradicionales, los fondos socialmente responsables, los microcréditos y las nuevas fronteras: los bonos verdes y las inversiones de impacto.
La Fundación Finanzas Éticas presenta la primera edición del “Informe de las Finanzas Éticas y Sostenibles en Europa”. Un estudio anual que analiza y compara bancos éticos con la banca tradicional. Además de ofrecer una amplia panorámica sobre los Fondos de Inversión Socialmente Responsables, las microfinanzas, los bonos verdes y las inversiones de impacto social. El informe se ha publicado en colaboración con la Fondazione Finanza Etica de Italia.
El documento marca los contornos, recoge la historia, las actividades y los volúmenes de las finanzas éticas y sostenibles en Europa. Aunque obvia diferentes movimientos en España como la Red de Finanzas Alternativas y Solidarias, REFAS, Coop57 o la banca ética sin intereses, proyecto JAK, entre otros.
En crecimiento
En esta primera edición los promotores se han marcado dos objetivos: demostrar a las personas que ya invierten de forma sostenible en la banca ética, que ésta sigue creciendo y ocupando espacios nuevos. Y en segundo lugar, educar a quién no ha oído hablar nunca de las finanzas éticas que son muy diferentes de las convencionales y que, en cambio, permiten conservar o aumentar el valor económico de los ahorros con el tiempo. Así como añadir una serie de valores diferenciales, como el respeto al medio ambiente, la lucha contra el cambio climático, el derecho a la vivienda o a una alimentación sana.
El conjunto de las actividades de las finanzas éticas y sostenibles de Europa descritas en el informe equivalen a 715.000 millones. 39.800 representan a los activos de aproximadamente treinta bancos éticos y sostenibles europeos, que a finales de 2016 habían concedido créditos por un total de 29.330 millones a decenas de miles de proyectos de inclusión social, defensa del medio ambiente, cultura o cooperación internacional.
En la comparativa sobre rentabilidad y beneficios recogida en el documento, destaca que la banca ética supera a la tradicional. Una vez finalizado el periodo de bonanza que precedió a la crisis del 2008, desaparecieron también los famosos crecimientos «de dos cifras» para los colosos grupos bancarios europeos. Ahora siguen en alza pero con mayor moderación y sin grandes diferencias respecto a los bancos éticos, que se confirman como más sólidos y resilientes: en los últimos diez años, sus rendimientos han sido constantes.
Descargar: Informe de las Finanzas Éticas y Sostenibles en Europa
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