Roberto Ravagnani: periodista brasileño y consultor de voluntariado y de responsabilidad social empresarial. Es asociado para el voluntariado GIA Consultores para América Latina y fundador de la ONG Canto Ciudadano en Brasil. También trabaja como voluntario.
He estado una semana en Río de Janeiro, conversando, presentando ideas e intercambiando informaciones sobre el voluntariado con personas de todo Brasil y de otros países.
Muchos ciudadanos me preguntan si el voluntariado da para tanto tema de conversación en una supuesta actividad tan sencilla y fácil de realizar.
Mi respuesta es simple: sí, pero no porque la actividad es compleja, sino por ser o parecer tan simple que se vuelve casi invisible. Muchos creen que la actividad de voluntariado es una acción que pueden hacer cuando quieran, sin mucho compromiso, como si el voluntariado fuera broma.
Para capacitar a un voluntario o crear un programa de voluntariado, en una empresa u organización social, hay que tener mucho tacto, pues lidiamos con personas, sentimientos y sensaciones.
Sólo la práctica nos trae la perfección, sólo el conocimiento llega a través del intercambio. Acciones que se practican en la actualidad en diversos países y localidades.
La semana fue modelada por conocimiento del área jurídica, contable, comunicación, gestión, creatividad, captación de recursos, marketing, entre muchos otros asuntos destinados al tercer sector.
Por lo tanto, las herramientas para gestionar programas de voluntariado se construyen a través del conocimiento, la innovación y mucha creatividad.
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