Roberto Gómez Prol: Licenciado en Periodismo. Máster en Comunicación Corporativa. Redactor y community manager. Voluntario en diferentes proyectos sociales, banca ética y culturales. “Nuestras decisiones individuales dan forma al mundo”.
Refugee Support es una organización afincada en el Reino Unido que nació en 2016 para dar respuesta a la crisis humanitaria que vivía Europa. La dignidad humana está en el centro de sus actividades, fue creada por dos activistas sociales, John Sloan y Paul Hutchings, y cuenta con más de 400 voluntarios. En la actualidad, operan con estructura estable en Grecia, y han colaborado también en México y en Bangladés.
El objetivo siempre ha sido ayudar a los migrantes a restaurar su dignidad, a reconstruir sus vidas y a volver a la normalidad bajo diferentes proyectos sociales.
En 2017 levantaron tiendas en un antiguo hangar del ejecito griego en el campo de Katsikas . A día de hoy, cuatro establecimientos de verduras y frutas frescas, leche, azúcar, harina, arroz, pasta, pañales y tres tiendas de ropa (una para mujeres, otra hombres y niños), ofrecen servicios a 1.000 refugiados de 28 nacionalidades diferentes.
La propia organización internacional entrega diariamente y de forma ordenada puntos gratuitamente entre los residentes del campo para poder realizar compras en los establecimientos. También se encargan de la compra de víveres a comercios locales, apoyando la economía local griega.
Abandonar el campo
Desafortunadamente, recientemente hemos conocido que Refugee Support deberá de abandonar el campo de Katsikas a finales del mes de marzo, y sus proyectos y actividades se irán con ellos ya que no serán cubiertos por ninguna entidad social o institución pública.
La versión oficial es que el gobierno local de Epirus les reclama el hangar que les había alquilado para sus proyectos, y que había arreglado – presupuesto de 40.000 euros desembolsado por la ONG-. Pero la realidad va más allá. En el campo hay otros 12 hangares vacíos y en mal estado, dañados por los residentes según las autoridades, aunque es simplemente una excusa fuera de la realidad. La verdadera motivación es que no quieren ojos que puedan denunciarles cuando en abril inicien el desalojo de refugiados del campo y les retiren la ayuda económica que reciben. Una situación en línea con la denuncia que esta semana han hecho pública 25 ONG de todo el mundo sobre la situación insostenible que viven los refugiados en Grecia.
Fondo de Empoderamiento
Antes del que las autoridades helenas entregaran la hoja de deshaucio, y en un paso más para promocionar la autosuficiencia, la organización creo un Fondo de Empoderamiento en julio de 2018. El concepto era sencillo concederían entre 200 y 1000 euros a proyectos viables de refugiados del campo, además de apoyo y asesorimiento legal. Invirtieron 12.000 euros en 16 actividades. Con la ayuda adecuada, algunas de las mismas podrían convertirse en empresas de éxito, y permitir a las familias comenzar de nuevo.
Desafortunadamente, el 11 de enero llegó la policía al campo y les obligaron a detener toda actividad con naturaleza inmediata. La policía cerró los negocios promocionados como un kiosko de productos básicos, otro de frutas y verduras, otro de pollo congelado, una panadería y una sala de juegos.
“Una de las condiciones de nuestro Fondo de Empoderamiento era que la actividad debía cumplir con la ley griega. De hecho, uno de los objetivos es fomentar la integración con la sociedad. Siempre les hemos dicho a quienes quisieran escuchar que esta es una oportunidad para que los refugiados sean menos dependientes del estado y les ayuden a desarrollar su potencial”, afirmaban desde la ONG.
“Todos en Grecia deben acatar las leyes y las regulaciones griegas y el estado tiene la responsabilidad de hacerlas cumplir. Pero estas son actividades sociales. Son los brotes verdes de la autosuficiencia y la independencia en un entorno único, pero hostil, y necesitan ser atendidos con cautela y cuidado”.
Hacía unas semanas entrevistábamos a uno de los fundadores de Refugee Support, Paul Hutchings, en torno a la iniciativa del Fondo de Empoderamiento. El cambio de política y de actitud contra las ONG por parte del gobierno heleno ya se comenzaba a vislumbrar.
Autosuficiencia
DS.- ¿Cómo ha sido la experiencia del Fondo de Empoderamiento?
Es más difícil de lo que pensaba. Cuando comenzáramos en julio de 2018 esperaba que obtuviéramos muchas propuestas y que una vez que concediéramos las ayudas económicas, el único apoyo que necesitarían sería el manejo administrativo y con la administración. No todos somos buenos empresarios, por lo que hemos tenido éxitos mixtos. Algunos lo han hecho muy bien. Algunos han fracasado por completo. El proyecto piloto fue diseñado para descubrir qué funcionaba y qué no. Todavía estamos aprendiendo.
Los dos aprendizajes clave para mí es que necesitamos ser más selectivos sobre a quién financiamos, de modo que cuando empecemos con alguien, ofrezcamos una suma mucho menor, digamos 200 euros y pongamos en escena el dinero que les concedemos. Y dos, que seamos mucho más pacientes sobre el progreso y el desarrollo de las actividades.
DS.- ¿Las empresas operan solo en el campamento?
Necesitamos tener cuidado con el lenguaje y con lo que estamos apoyando. No estamos apoyando a empresas. Estamos apoyando actividades sociales para ayudar a reducir los niveles de inactividad y aumentar las oportunidades de autosuficiencia. Algunas de las actividades pueden convertirse en negocios y estamos buscando una forma para ayudar con eso ahora. Un ejemplo es el servicio de panadería. Y sí, todas las actividades actualmente solo operan en el campamento.
DS.- ¿Puede un migrante o un solicitante de asilo establecer un negocio mientras espera resolver su situación?
Deben ser reconocidos como solicitantes de asilo para que los consideremos. El estado griego no les permite poseer empresas bajo su propio nombre, pero sí se les permite trabajar. Tenemos una empresa comercial que puede emplear a personas.
No basta con dar caridad a la gente
DS.- ¿Cuáles son las principales lecciones que su organización ha aprendido de esta experiencia?
Continuaremos porque la inactividad, el aburrimiento y el aislamiento en el campamento son perjudiciales para la salud mental de las personas. No basta con dar caridad a la gente. Necesitan ponerse de pie. Y con Europa tan reticente a recibir a los refugiados que se encuentran actualmente en Grecia, cuando obtengan el estatus de ‘permiso de permanencia de 5 años’, tendrán que quedarse en Grecia. Las autoridades no lo están facilitando en Katsikas (aunque sabemos de otros campamentos donde existe una gran cantidad de actividades comerciales que pueden continuar).
DS.- ¿Cuáles son los principales problemas a los que se enfrenta Refugee Support en Grecia? Tenemos una lucha constante para encontrar los 5.000 euros a la semana que cuesta proporcionar todo lo que hacemos. Pero específicamente en Grecia, el mayor problema es el entorno político nacional y de la UE. Los campamentos de refugiados se están utilizando como una forma de brindarles a las personas un lugar donde vivir, pero sin responsabilizarse de su bienestar y su futuro. Se les mantiene en el limbo. Son como cárceles abiertas. El problema que se nos plantea a nosotros es cómo apoyamos a los refugiados en Grecia sin apoyar las políticas inhumanas de los campamentos de refugiados.
DS.- ¿Sigue el gobierno de Grecia proporcionando fondos a cada refugiado?
Es el dinero de la UE que se distribuye a través de agencias como la Cruz Roja. Los adultos reciben aproximadamente 115 por mes. Pero esos son los números aproximados, en una fórmula compleja de cálculo.
Educación bajo mínimos
DS.- ¿Es Katsikas el único campamento con presencia de Refugee Support en Grecia en este momento? ¿Seguís proporcionando comida en Dolina?
Tenemos una presencia permanente en Katsikas con un mini-mercado que sirve a todo el campamento con comida gratis, pañales y toallas sanitarias. Hacemos entregas mensuales a los campamentos de Doliana y LM Village.
DS.- ¿Cuántas personas viven en elos campos donde tenéis presencia?
1.000 Katsikas, 140 Doliana y 250 LM Village, aproximadamente.
DS.- ¿Cómo son las condiciones ahora en invierno?
Hace frío, recientemente la temperatura era de 14 grados centígrados bajo cero. Y había un fuerte viento frío. Es un entorno hostil. Pero sobre todo la temperatura está alrededor de la congelación. Las cabinas en Katsikas (y las habitaciones en LMV / Dol) tienen calefacción, por lo que no tenemos ningún problema con el frío.
DS.- ¿Disponen los refugiados de atención médica y escolar?
Cuentan con atención médica y asistencia sanitaria gratuita en los hospitales. El estado griego apenas puede proporcionar a su propia gente, por lo que la calidad y la disponibilidad es ocasionalmente buena, aunque excepcionalmente. La escuela está disponible para los niños, pero la asistencia es baja. Una combinación de lenguaje, manejo de la conducta, recursos, negligencia de los padres o preocupaciones significa que muchos no tienen ningún tipo de educación.
Déjanos tu opinión