el DiarioSolidario
Los niños de Gaza sufren miedo y ansiedad, falta de sueño y muestran preocupantes signos de angustia, como temblores constantes y mojar la cama, ha denunciado Save the Children, tras la violencia de once días que ha terminado con un alto el fuego. “Los niños palestinos e israelíes sufrirán las consecuencias mentales durante años”, ha advertido la organización.
«Siento mucho terror, y ahora ese terror es cada vez mayor. Empezamos a dormir en el pasillo porque tengo mucho miedo. No puedo ir a ningún sitio sin mi madre o mi padre. Las ventanas de nuestra casa se rompieron sobre nosotros y mi madre tuvo que protegernos. Tengo mucho miedo y el miedo se ha extendido por todas partes. Me paso la noche en vela, no puedo dormir por los sonidos de sus ataques aéreos», Amal, 10 años.
Al menos 65 niños palestinos en Gaza y dos niños israelíes han muerto desde el 10 de mayo, cuando comenzó la escalada. Además, los ataques aéreos han dañado 51 escuelas en Gaza y tres en Israel. Los centros educativos de ambos países están cerrados, y miles de menores y sus familias en Palestina han sido desplazados.
Los niños que viven con un miedo constante a la violencia pueden sufrir una ansiedad permanente y desarrollar respuestas fisiológicas al estrés que pueden tener efectos duraderos, ha afirmado la organización.
Pesadillas
Una investigación anterior tras los 50 días de conflicto en 2014 reveló que, después de un año, siete de cada diez niños de las zonas más afectadas de Gaza seguían sufriendo pesadillas y el 75% seguía mojando la cama con regularidad. Hasta el 89% de los padres informaron de que sus hijos tenían miedo constantemente. La investigación realizada en 2019 tras la escalada de 2018 encontró resultados similares.
«La diferencia esta vez es que la exposición y la intensidad a la violencia han sido peores. Los ataques se han producido de día y de noche: los niños se vieron obligados a esconderse las 24 horas del día. Se encontraban aterrorizados por el constante sonido de las bombas. Muchos tiemblan sin parar, y sufren privación de sueño, náuseas y una gran angustia», ha afirmado, asesora de Salud Mental y Apoyo Psicosocial de la organización en los territorios palestinos ocupados, Luma Tarazi.
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Gaza necesita urgentemente especiliasta para trabajar el apoyo psicosocial. Esta metodología enseña a los niños y a los adultos a ser resilientes, y les ayuda a expresar sus miedos en entornos sociales como las familias y los amigos.
Solución a largo plazo
«La comunidad internacional debe trabajar con todas las partes para llegar a una solución a largo plazo. Se deben crear las condiciones necesarias para la reanudación de las conversaciones entre las partes con el fin de lograr una solución justa, defendiendo la igualdad de derechos tanto para los niños palestinos como para los israelíes. Esto incluye el fin del bloqueo, que dura 14 años, y de la ocupación, que dura décadas, como única solución sostenible al conflicto. Esto garantizará que todos los niños de la región puedan vivir en paz», ha afirmado el director de Save the Children, Jason Lee.
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