El Aita Mari reinicia su labor de rescate en el Mediterráneo

el DiarioSolidario

El Aita Mari vuelve a zarpar. Después de permanecer amarrado en el Pireo realizándosele reparaciones de mantenimiento durante casi dos meses, el atunero se vuelve a hacer al Mediterráneo, a las aguas internacionales de Malta y Libia (Zona Sar). Un espacio donde en las últimas 24 horas, el Open Arms ha realizado tres rescates, y aproximadamente 237 personas han sido salvadas. Además, otras 403 se encuentran en el Ocean Viking y 78, en el Alan Kurdi, auxiliadas igualmente en los últimos días.

Las organizaciones de rescate se encuentran ahora con una situación política más tranquila tras la firma de un acuerdo a nivel europeo para el reparto de migrantes entre Francia, España, Italia, Portugal y Alemania. Sin ir más lejos, en los últimos días el país francés ha acogido a una parte de los 79 supervivientes que fueron rescatados por el barco guipuzcoano el pasado 21 de noviembre.

Durante la espera de estos meses, desde Salvamento Marítimo Humanitario (SMH) no han detenido los motores. El lehendakari, Iñigo Urkullu, recibía ayer a tres de sus miembros en Lehendakaritza. En el encuentro se ha pedido una mayor colaboración e implicación de las instituciones vascas. Se ha subrayado la necesidad de que las autoridades busquen cauces para aliviar el «sufrimiento de las miles de personas atrapadas en las fronteras de la Union Europea».

La primera ikurriña

Asimismo, en la reunión se ha valorado la implicación de la sociedad vasca con las personas migrantes. Ya sea en tierra o en el mar, el compromiso por una sociedad más digna y justa se mantiene en pie. Como símbolo, desde Salvamento Marítimo Humanitario han regalado al lehendakari la primera ikurriña que ondeó en el Aita Mari.

“Su tela hecha jirones es la prueba de las condiciones tan duras que tienen que enfrentar en el mar las personas que se embarcan en una patera” han afirmado.

Esta reunión ha sido el acto final de una semana de incidencia política donde, miembros de la organización acompañaron al intergrupo de Derechos Humanos del Parlamento Vasco a Grecia. En ese viaje, los representantes políticos fueron testigos de la grave situación que se vive en el asentamiento de la isla de Quíos y, de la falta de atención que sufren los casos más vulnerables.

«En Grecia, los parlamentarios han visto la urgencia humanitaria y el desamparo de las personas en el campo. Ahora habrá que buscar una salida a este sufrimiento: si la reubicación es compleja, no podemos ceder porque otras soluciones tienen que haber, como visados humanitarios o evacuaciones de urgencia», ha explicado tras el acto Iñigo Mijangos, presidente de la ONG.

Apoyo de la sociedad civil

El Aita Mari se hará a la mar hoy, pero no lo hará sólo, como símbolo también del apoyo de la sociedad civil, han salido para Grecia, 150 paquetes de emergencia para náufragos/as donados por la plataforma ciudadana, Hotz Oñati. Están compuestos de pantalón, camiseta y toalla. Sin duda, “nos ayudarán a dar una mejor respuesta tras un rescate”, han asegurado.